30 de enero de 2008

La vi como el viento

La vi como el viento
abatiendo hojas con un silbido,
dirigiendo veletas que me señalaban,
mientras caminaba escoltada por el frío.

Me gritó con su aliento,
en una noche convulsa de enero,
y me arrebató con violencia lo que tenía,
humillándome con el desdén de su silencio.

Siguieron noches en vela
o madrugadas que entran sigilosas,
Madrid es una ciudad llena de insomnes,
marchita toda por sus pisadas.

Anoche me sonrió la suerte,
la pude ver convertida en brisa,
me reconoció, me dio la mano, una sonrisa,
y al oído el francés de sus susurros:

c'est la vie comme elle vient.

Merci beaucoup, Lewis.

29 de enero de 2008

@echo off

Son palabras translúcidas,
ecos de chillidos fantasmales
emitidos desde un abismo ausente,
que ascienden, escalan pendientes imposibles,
buscando romper con sus piolets la monótona tranquilidad.

Son los deseos vertidos en fuentes,
románticas microtransacciones,
recuerdos de los paracaidistas
que empujabas con tu aliento
durante las tardes eternas.

Son pompas multicolores
que planean sin rumbo (aparente)
buscando el abrazo de los sueños,
hasta encontrar el contacto
que las lleve al estallido.

Son aquellas cenizas
que alguna vez avivaron un fuego,
peligrosas, admirables, intocables,
representación incandescente
de la conformidad.

25 de enero de 2008

Viernes

Hoy es un viernes con olor a lunes,
hace un sol de injusticia, lo real es el frío,
y yo olvidé mi gorro, mis guantes, mi abrigo.

Esta mañana sabe a crepúsculo,
acariciándola notas su azul oscuro
que ilumina un paisaje de mentira.

Tengo los ojos abiertos sin haber despertado,
Mis párpados son dedos que pasan minutos.

Cierro los ojos.

Cierro los ojos.

21 de enero de 2008

Mi cuaderno

Clairefontaine significa útero incansable,
gestación de engendros poemas
vergüenza (de la autoconciencia)
clínica abortista.

Clairefontaine pare versos.
Después les arranca la cabeza.
Como Κρόνος.
De un bocado.
Eso sí, los mastica bien,
¡Hasta cien veces!
Y con la boca cerrada.

Está bien educada.

Clairefontaine es brutalidad.
No sabe aceptar una crítica.
Engendra poemas sin voz,
pero no importa. Ella se encarga.
Ama
Disfruta
Se regocija en la torpeza.
Admira cómo se tambalea
retuerce
encoge.

Y siempre lo consigue.
Es mejor que lavar a 90º C. (quema)

Clairefontaine no tiene brazos,
aun así puede mimar a sus niños.

Les arranca acaricia su pelo
sus dedos
sus dientes
sus uñas.
Lentamente.

Poco
a
poco.

1
a
1.
Total.
El silencio se hizo sin voz.

Shhhhhhhhh.

Sin voz no se oyen gritos.

9 de enero de 2008

Back and forth

Méceme, olvido,
como el mimbre de esa silla
que cantaba sueños con voz ronca
cuando con los ojos cerrados me movía
hacia adelante

para
verte,
escucharte,
amarte,
odiarte,

hacia atrás
para
jugar
soñar
llorar
acabar
(contigo).

Hasta caer rendido.

1 de enero de 2008

Feliz año nuevo

Generalmente, te habría tragado.
Te habrías asomado por mi glotis
y en un acto premeditadamente reflejo
te habría devuelto a tu lugar de origen.

Devolución por defecto de fábrica.

No pude aguantarte, dos mil siete.
Tuve que hacerlo. Vomitarte.
Todo patrocinado por los dedos
índice y corazón de su ausencia.

Y al salir te llevaste contigo
todas las ilusiones que prometiste,
el turrón, el cava de esperanza
y los churros con chocolate.

Juntos asistimos al desmembramiento de la interdependencia de la especie.

No le dimos importancia.

Y ahora,
en este mismo instante,
el segundero de un reloj recorre una luna llena,
una luna que se desangra de carmín de pintalabios,
y todos,
desalmados hasta los dientes,
brindamos por tu muerte, hijo de puta.

Y por el nuevo año que comienza.